“…para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él” (Efesios 1:17) La oración de Pablo en Efesios, capítulo 1, es una de las oraciones más reveladoras y poderosas que se encuentran en la Biblia. Podemos aprender mucho de esta oración y aplicar el espíritu y el corazón de la oración a nuestras propias vidas. Pablo ora para que los creyentes de Éfeso tengan un espíritu de sabiduría y revelación. La sabiduría y la revelación son cosas espirituales. Pablo no está hablando de la sabiduría y la lógica del hombre. La razón por la que él oró esto, es porque el espíritu de sabiduría y revelación no se libera automáticamente en todos. Hay cristianos que tienen muchos años de renacidos, pero parecen tener muy poca sabiduría y revelación espiritual. No parecen crecer y, a menudo, no parece importarles. Pablo oró: “…alumbrando los ojos de vuestro entendimiento…” (v.18) Una vez más, no hubiera sido necesario que Pablo orara para que nuestro entendimiento fuera iluminado si esto sucediera en forma inmediata en el nuevo nacimiento. ¿Estás iluminado en el reino espiritual? Pablo oró: “… para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado…” (v. 18) ¿Cuál es Su llamado en tu vida? ¿Cuál es Su propósito para ti? ¿Tienes pasión por saberlo? Pablo oró para que los creyentes lo supieran. Dios responde a la oración llena de fe. Pablo oró para que podamos saber… “…cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos…” (v. 18) ¿Has considerado la redención desde el punto de vista de Dios? Su creación se perdió en el pecado y la oscuridad, pero ahora a través de la cruz ha sido redimida. Su gloria se enriquece con la cosecha de hijos e hijas que fue hecha posible por la sangre de Jesús. Pablo oró para que podamos saber... “… cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza…” (v.19) Se necesita una revelación nacida de una oración de fe para incluso comenzar a concebir cuán grande es Su poder para con nosotros (a nuestro favor). Las promesas de: "vida abundante", "abundantemente", "sí y amén", "darnos gratuitamente todas las cosas" y "todo lo bueno y todo don perfecto" requieren revelación espiritual, conocimiento y comprensión. Haz tuya la oración de Pablo. Cree en Dios por una revelación de sabiduría, entendimiento espiritual y Su poder en tu vida. La verdadera vida victoriosa comienza aquí.
