Algunas veces has pensado que Dios ya no te va a bendecir por algo que fallaste, o llegaste a pensar que no logras cambiar y por eso te pasa todo lo que te pasa?
Hebreos 13:8 Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos
Pues no eres la única persona que piensa asi, de hecho todos cuando llegamos a los caminos de Dios pensamos que todo depende de nosotros , crremos que las bendiciones de Dios dependen de lo que hacemos o dejamos de hacer, pero pensemos en lo siguiente:
¿Por qué algunos creyentes pasan de muerte a vida, de la oscuridad a la luz, del caos al orden, y de la depresión al gozo mientras que otros creyentes parecen continuar en la miseria del fracaso crónico y vidas llenas de drama y carencia?
¿Acaso no fuimos todos hechos una nueva creación?
¿No fuimos todos llenos con la misma presencia y naturaleza de Dios?
¿Por qué los resultados son tan diferentes?
¿Ama Dios a algunos más que a otros o trata mejor a algunos que a otros?
La respuesta es muy sencilla, por nuestra forma de pensar y por lo poco que le conocemos a Dios.
la verdad es que Dios no cambia, Dios no es el variable. Dios es continuamente y constantemente bueno, inmutable y ha proveído para cada necesidad del hombre a través del Evangelio.
Comprender la verdadera naturaleza de Dios es el primer paso para liberarse del fracaso, la pérdida y la angustia. y la forma de pensar errada que tenemos.
El variable siempre ha sido el hombre. Considera lo siguiente:
“Mi pueblo fue destruido por falta de conocimiento” (Oseas 4:6)
“Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado y con los oídos oyen pesadamente, y han cerrado sus ojos; para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y con el corazón entiendan, y se conviertan, y yo los sane.” (Mateo 13:15)
“Y apartarán sus oídos de la verdad, y se apartarán de las fábulas.” (2Timoteo 4:4)
“…por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.” (2 Tesalonicenses 2:10)
El hombre es es el siempre cambia, Dios no lo hace, Dios siempre esta alli en el mismo lugar inmovible esperando por ti , con sus promesas y verdades, no importa cuanto tiempo pase, cuanto te tardes el es paciente y espera por ti.
La decisión es tuya.
Puedes elegir tu futuro y tu destino. Puedes elegir permitir que el Espíritu ame a través de ti. Puedes elegir recibir el gozo del Señor, renovar tu mente, orar en el Espíritu, ser un hacedor de la Palabra, dar y perdonar y vivir por fe.
Dios no es el variable en nuestras vidas. La gracia es una provisión constante y abundante para cada necesidad. Lo que varía es nuestra voluntad. Elegimos ser pasivos o activos en nuestra relación con Dios.
"Él es galardonador de los que le buscan”. (Hebreos 11:6)
Decidete ya , ve por todas tus bendiciones , El espera por ti y la mesa esta preparada con todo un banquete especial.
Somos Bendecidos
Feliz dia